Quiero más que tenerte dentro, no sólo me vale eso.
Quiero que no haga falta cualquier otra cosa que no sea tu tacto violento, fuerte, lento, haciéndose en mí eterno.
Quiero correr entre las sábanas o el suelo, y mezclar todo mi odio con el tuyo entre flujos, gritos y plétoras de locura, creando un combinado excelso, entre lo vivo y lo muerto. Lo loco y lo cuerdo.
Sólo quiero morderte fuerte y ahogar mi rabia al sentir tu sangre corriendo por los canales que son mis venas.
Solo, sólo eso quiero. Tu juego y nuestro, mi cuerpo, tu cuerpo. Soy tu dueña y tu sierva.
Quiero nacer, nacer de nuevo mezclando nuestros sexos en dos mundos, tres mundos, miles de mundos partidos en uno, sangrando lava que impregnará nuestros cuerpos lascivos, resbaladizos con el tiempo.
Quiero tu boca y tu traición, y chuparte hasta la última gota de veneno corrido. Y germinar mil veces desde el suelo. Contigo.
Pero para nacer, primero hay que estar muerto.
Así que mátame de nuevo...
Enviciadas letras, deliciosas, feroces.
ResponderEliminarUn placer leer.
Feliz jueves!
Inquietantes textos, un placer leerte.
ResponderEliminarque tengas una buena semana.
un abrazo.
Buah que intenso!! estoy hasta asustado ;)
ResponderEliminarBesazos enormes
jopetalines... I want it all, and I want it now, como decían los queen.
ResponderEliminarEsa esencia tentadora del masoquismo en éste precipitado mundo de tu sexo.
ResponderEliminarMe encantó.
Saludos.
Ah, que buenoooooooo...
ResponderEliminarLa locura pasional en todo su esplendor.
Saludos.
Y sin parar, día y noche.
ResponderEliminarMuy bien.
Saludos.